NUEVO DIARIO EN LA CIUDAD

Nunca, que se sepa, las experiencias mediáticas “enganchadas” a un programa político electoral dieron mayores resultados. Caducaron tras un revés en las urnas. E incluso después de un triunfo porque, entonces, ya no hacía falta un excesivo despliegue propagandístico.

Pero siempre hay una primera vez. Y puede ser ésta.

Este lunes (13), apareció la edición número 1 de CRONICA DE BAHÍA, tabloide color que, o mucho nos equivocamos o responde a una estrategia en la que se unen, el kirchnerismo y un nuevo multimedio local, conducido por el empresario Emilio Turcumán (Radio Universal y Canal 11), además de otras frecuencias radiales menos notorias.

En la mañana de esta jornada de lunes, en adyacencias del palacio municipal, en la antesala de la llegada del gobernador, Daniel Scioli, todo parecía tener un denominador común: CRÓNICA y su primer número. El propio Turcumán, ensimismado en eso (quizás porque no podía ser de otra manera), empezó por “digitar” sus saludos. Eso ya, de por sí, marca una tendencia, precursora de otras acciones más significativas.

Nunca la intromisión manifiesta de un gobierno en el manejo mediático ha sido positiva, porque condiciona primero; discrimina después; y, lo que es peor, marca el comienzo de males mayores.

Si la sanción y puesta en vigencia plena, reglamentación ya aprobada, de la ley de medios podía tener, sin duda, aspectos positivos, dignos de ser elogiados y tenidos muy en cuenta, la incursión gubernamental (o del partido oficialista, a través de sus ejecutores) en funciones multimediáticas hace vislumbrar un futuro cuanto menos amenazante.

Ojalá no sea el caso que arranca con CRÓNICA DE BAHÍA, un diario unido a una radio y a un canal de televisión. Lo que se ha criticado hasta el hartazgo en otros tiempos, en que tallaba demasiado fuerte el complejo afincado en Sarmiento 54, parece que puede repetirse con asociados al gobierno de turno. Malo, de raíz, desde el comienzo, para ser absolutamente claros.